La Newsletter más Atípica de Internet está ya de camino...

¡¡Pero aun te queda un paso muy importante que dar!!

Voy al grano.

 

Mira, te voy a contar primero qué es, para mi, una Newsletter Típica:

 

– Una Newsletter Típica es la que, por norma, la escribe una persona diferente de la que firma como remitente.

– Una Newsletter Típica es aquella que te intenta hace creer que el email, se ha escrito directamente a ti, utilizando las etiquetas del nombre que dejaste al suscribirte.

– Una Newsletter Típica es aquella en la que se utiliza un lenguaje muy formal, así como si estuviéses escribiéndole a su santidad.

– Una Newsletter Típica es aquella en la que se te quiere vender, pero no no te lo dicen, sino que intentan hacer juegos de neuromarketing que, oye, está genial, pero ya sabemos todos de qué va esto.

 

Podría seguir… creo, pero creo que ya me has entendido… así que voy a parar.

 

Y ahora te cuento el porqué esta Newsletter es Atípica:

– Los correos que te lleguen serán escritos TODOS por mi. 

No tengo a ninguna persona contratada para escribirlos, la verdad, a mi me gusta ser yo quien te hable porque yo soy yo, única e irremplazable, y me gusta que me conozcas a mi, no al o la copy, por muy majo o maja que sea.

 

– No voy a utilizar las etiquetas que normalmente se usan en los emails con los nombres, a veces he incluido mi nombre con alguna errata en alguna newsletter y el ver cómo me llegan esos correos con ese nombre mal escrito una y otra vez, es una tortura sin clemencia o, como yo digo, la muerte a pellizcos.

 

–  Te voy a escribir tal como yo soy, como yo hablo, si eres su santidad… discúlpame, yo es que hablo así, y no tiene sentido que te escriba de una forma y, si en algún momento hablamos, te esté hablando de otra… yo lo veo incoherente, no se tú. Eso sí, evitaré cualquier uso de… llamémosles… palabras inadecuadas.

 

– No te voy a vender en la newsletter, o sí, depende del día, pero lo haré abiertamente, te lo digo desde ahora, si tengo algo para ofrecerte, te lo ofreceré, de eso se trata un negocio, pero no te voy a marear. 

Si te viene bien, genial, si no, genial también. 

 

Si no soportas que te cuente lo que tengo para ofrecerte, sinceramente, no tiene sentido nuestra relación. Es mejor un adios a tiempo, ¿o no?

Y a parte de esto, quiero que disfrutes leyéndome, y quiero compartirte parte de lo que se y que puede ayudarte.

No quiero aburrirte, si lo hago, por favor dímelo, dime Lola, me estás aburriendo ya con tus emails.

 

Y si ni siquiera tienes ganas de decírmelo, cancelas la suscripción y no volverás a saber de mi (qué dramático me ha quedado esto último).

 

Pues de eso se trata esta newsletter atípica de la que te hablo.

Si todavía te quedan ganas de que te cuente más...

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Cómo suena esto de «personas exitosas» ¿verdad?

 

Luego te sigo contando todo esto de las personas exitosas y porqué yo me siento, hoy más que nunca, una persona exitosa.

Pero ahora ¡¡acuérdate!! 

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