No se quien se inventó o a quien le he escuchado la palabra tragozando…
Y es que esa palabra define muy bien como me siento actualmente, en mi día a día, tanto yo, como otras muchas personas que conozco y que aman su trabajo.
Eso si, a veces los mapas mentales de otras personas no están preparados para entender que disfrutas haciendo tu trabajo y que, además, cobres por ello.
Suelen ser las mismas personas que, cuando decidiste emprender, te decían: “Búscate un trabajo de verdad”.
Es como que, para poder cobrar por tu trabajo deberías de pasarlo mal, debería no gustarte y mostrar al mundo como te esfuerzas por hacer bien tu trabajo.
Estar estresado, decir todo el tiempo “tengo mucho trabajo”, así resoplando…
Es cierto que esto, muchas veces da lugar a malos entendidos.
Porque, por un lado, el que estés disfrutando mientras trabajas no significa que, a veces, no tengas que renunciar a otras cosas que también te gustan, sino que priorizas lo que, para tí, en ese momento, es más importante y, por otro, si disfrutas con tu trabajo significa que tus resultados serán mucho mejores que si no lo hicieras.
Ya está más que demostrado este hecho: Cuando disfrutamos, cuando nos lo pasamos bien, nos emocionamos, y sólo cuando nos emocionamos, conseguimos hacer cosas brillantes.
Si yo tuviese que elegir entre un profesional que disfruta con su trabajo, que se lo pasa bien, que no le supone ningún esfuerzo (en negativo) hacerlo, y otro profesional que «debe» dedicar muchas horas y mucho esfuerzo, pasándolo m
al porque preferiría estar haciendo otra cosa, para conseguir lo mismo… no sé tú, pero yo creo que no hay duda de con quien me quedaría.
Es cierto qu
e hemos dado grandes pasos a este respecto y que, cada vez más, puedes encontrarte con personas que disfrutan, que han conseguido dedicarse a eso a lo que sienten que quieren dedicarle su vida.
Porque, ¿qué es si no nuestra propia vida la que le estamos dedicando a eso que llamamos “trabajo”? ¿Eso que nos permite tener, en muchas ocasiones, lo mínimo para poder vivir en esta sociedad donde, el trueque de antes, es el dinero de ahora?
Es nuestra vida, la única que tenemos, la que ponemos al servicio de nuestro trabajo y, si esto es así, creo que va siendo hora de tomarnos en serio a qué vamos a dedicarla.
Tú que estás leyendo esto ahora mismo
, ¿te has parado alguna vez a reflexionar sobre esto? ¿Sientes que estás en el camino correcto?
Si te apetece, puedes hacer el siguiente ejercicio:
- Toma papel y boli.
- Piensa en el mes de octubre del pasado año y, de forma general, puntúa cómo te sientes de bien contigo mismo, contigo misma, y con tu vida cada mes, hasta llegar al mes actual.
Sería algo así como:
Octubre 2019:
– A nivel personal interno (contigo misma, mismo):
– A nivel personal externo (familia, amigos):
– A nivel profesional:
Noviembre 2019:
– A nivel personal interno (contigo misma, mismo):
– A nivel personal externo (familia, amigos):
– A nivel profesional:
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Octubre 2020:
– A nivel personal interno (contigo misma, mismo):
– A nivel personal externo (familia, amigos):
– A nivel profesional:
Si piensas que este año, por su peculiaridad con la situación sanitaria actual, no es un buen reflejo de tu vida, puedes tomar otras épocas, incluso puedes hacerlo con varios años.
Lo importante es pararte y reflexionar, hacer una foto de tu vida actual, meterte dentro de esa foto como un observador y, sabiendo lo que sabes y lo que sientes, valorarlo de la forma más objetiva posible.
3. Una vez tengas más o menos ese resultado, piensa que, si no cambias nada, los próximos años de tu vida serán iguales, así, hasta el final…
Este ejercicio es una variación de la rueda de la vida (para quienes no la conozcáis, os animo a que la hagáis, hay mucha información por internet al respecto, y si tenéis dudas, siempre podéis consultarme). En lugar de fijarse sólo en el momento actual, vamos tomando pequeños fragmentos de momentos de nuestra vida y los vamos valorando, y eso nos da una visión general de si estamos viviendo como nos gustaría o, por el contrario, es momento de hacer algún o algunos cambios.
Por tanto, el hacer este ejercicio puede darte una medida de si realmente estás viviendo la vida que quieres, cómo de satisfecho o satisfecha estás con ella e, incluso, puede darte la motivación que te falta para dar el siguiente paso hacia la que tú quieres de verdad.
¿Te atreves a hacerlo?
Deseo que este artículo te haya gustado y que, sobre todo, te sirva.